Saltar al contenido

¿Yakisugi o Shou Sugi Ban? ¿Cuál es el nombre correcto de la técnica?

¿son lo mismo?

Hace ya cinco años que hemos empezado a investigar esta técnica y, hay que decirlo, siempre tuvimos una tremenda confusión sobre qué termino es el correcto para denominarla: ¿Yakisugi o Shou Sugi Ban? Existe información abundante en la internet sobre esta técnica, y uno puede, en cuestión de segundos, acceder a muchos portales que promocionan, describen o venden productos asociados indistintamente a los dos nombres, pero ¿Cuál es el correcto?

Lo cierto es que si hoy vamos a Japón y les preguntamos por el “Shou Sugi Ban” nadie podría decirnos nada al respecto.

Entre Yakisugi y Shou Sugi Ban, Yakisugi es la correcta ya que es la única que existe en el idioma japonés.

Desde el siglo XVII la técnica mediante la cual se prolonga la vida útil de la madera en país del sol naciente se llama “Yakisugi”, toda vez que “Yaki” significa quemar (o asar) y “Sugi” hace referencia a la especie endémica originaria del Japón llamada Cryptomeria Japónica, la cual se describe como un Cedro Japonés pero en verdad es una especie de Ciprés. Hasta aquí, como vemos, todo es muy confuso, por eso vamos a aportar un poco de claridad a este tema. 

Un poco de historia

Decir exactamente cómo nace el Yakisugi es algo que en verdad no podemos saber ya que la técnica de carbonizar la madera para alargar la vida útil es algo que hemos podido encontrar en muchas culturas alrededor de la historia, sin embargo muchos coincidirán en afirmar que el hecho de que el Japón haya sufrido numerosos incendios y catástrofes ha dado lugar a que muchas fachadas se hayan quemado, estas fachadas, carbonizadas por accidente, han dado lugar a una revelación con el paso del tiempo: aquellas que se habían quemado duraban mucho más que aquellas que no. 

Lo cierto es que el Yakisugi era una técnica casi en desuso en el Japón, un producto doméstico solo fabricado de manera artesanal y para prolongar la vida útil de la madera a bajo costo.

lenguaje de mercado

Fue un estadounidense quien, habiendo ido a Japón para hacer un estudio sobre materiales de construcción, descubrió que el Yakisugi podría tener un altísimo potencial en occidente tanto por su resistencia en exterior como por su textura y color.

Fueron los norteamericanos quienes intentaron, en primera instancia, fabricar esta técnica fuera de Japón y, al momento de producir el marketing para colocarla en mercado, cometieron el grave pecado de renombrar el producto con un nuevo nombre.

Este nuevo nombre es una mezcla de palabras del chino con el japonés y con otras que no existen en ningún idioma conocido: “Shou Sugi Ban”

Shou Sugi Ban es un invento en ningún idioma conocido a la fecha, una farsa publicitaria para sortear seguramente algún registro de marca, pero que, en definitiva, no hace alusión a nada conocido en el Japón ni en ningún país del mundo.

El Yakisugi, el nombre auténtico.

Yakisugi deviene así como la denominación auténtica para esta técnica, aún cuando gran parte del mundo la conoce como Shou Sugi Ban. (https://www.nytimes.com/2017/09/19/t-magazine/shou-sugi-ban.html).

Nosotros no solo queremos y cuidamos este producto, sino que nos sentimos en la obligación de protegerlo, por eso hemos decidido llamarlo, aún cuando no convenga por las métricas de Google, «Yakisugi». 

Es que sentimos que, si queremos hacer algo real y profundo, tenemos que empezar por ser auténticos.

Por eso, la próxima vez que venga un conocido o amiga tuya y te hable del Shou Sugi Ban lo primero que tenés que hacer es mirarla con cara de que sabés algo que ella no sabe, explicarle el verdadero nombre y enviarle este link para que nos conozca 😉 .